De estatura baja, cuerpo delgado, conservó en su vestimenta el largo al tobillo y la sencillez en toda ella. Sin adorno y maquillaje, se peinaba el largo cabello hacia atrás, terminando en un rodete en la nuca, cubriendo su cabeza con el capelo. De ojos grandes, color negro, mirada leal, sincera, suaves, en los que no había dobleces. Manos delicadas, delgadas, dedos largos y finos, hechas para la prosa y la poesía. De voz suave y pausada.De andar ligero, los que la acompañaban debían acelerar los pasos.De trato cordial y afectivo. En la intimidad de su alcoba-escritorio, en las horas de soledad y silencio, escribía en cuadernillos hechos por ella misma, lo que se ha dado a conocer como la “Obra de la Fraternidad Cristiana Universal”. Estando los mismos a resguardo del deterioro o manoseo. Supo enfrentarse, con toda serenidad, a las impertinencias y prepotencias de inconscientes, dando respuestas cortas y sencillas, con tal lógica que desarmó a más de un bruto, aunque la procesión fuera por dentro. Cumplió a mis ojos y sentir humano con su propia Ley para concretar la Obra, contra vientos y mareas, soportando bravas tormentas sin claudicar de su pacto con el Divino Maestro. Siendo el Amor de Él y a Él, soporte de sus angustias y soledades interiores y exteriores.Reflexionad que en su Obra trajo nuevamente al Cristo a la Tierra, tal cual lo sentimos vivir en nuestro corazón.
Nació en la ciudad de Villa del Rosario, provincia de Córdoba, República Argentina, el día 18 de marzo del año 1893. Siendo sus padres Don Rafael Eugenio Luque y doña Dorotea Álvarez. Educada en el Colegio de las Carmelitas Descalzas de la ciudad de Córdoba.Radicada desde el año 1932, en una isla del delta bonaerense en la localidad de Tigre, fundó la escuela “Fraternidad Cristiana Universal” en el año 1938. Siendo sus fundamentos: el cultivo interior por el “conocimiento de sí mismo”, y la unión íntima con la Divinidad por la meditación conjuntamente con el buen pensar, sentir y obrar. Siendo la tetralogía de la Obra, las bases del conocimiento espiritual, moral y ético. Escritora de pluma ágil, con alas de cóndor, remontó los planos terrestres hasta posarse en la morada de los elegidos por la Eterna Ley para descorrer los velos del Archivo de la Luz, donde está grabada con calcos a fuego la evolución de cada partícula de chispa divina emanada del Gran Todo Universal.¿Qué vio su mente iluminada? ¡Formidable Apocalipsis presenció al descorrer un Arcángel, ante ella, el velo de desposada de la Maga Invisible de los Cielos, y dejar al descubierto las glorias, triunfos, luchas, abnegaciones, sufrimientos y esplendores de la muerte de los amantes del Amor y la Justicia por un Ideal de liberación humana!¿Qué más? Las vidas de los misioneros divinos que limpiando de malezas los campos, abrían surcos para la siembra del Amor Fraterno en las almas que serían las encargadas de hacerla fructificar el ciento por uno. ¿Y por último? Las vidas mesiánicas de un Arcángel del Séptimo Cielo de los Amadores, que dejando su morada de paz y amor, descendía a los planos terrestres para mezclarse con las pequeñas almas inconscientes de su destino, y también para que de su mano, de su manto, nos prendiéramos los que queríamos dejar de ser almas que se revuelcan entre el lodo de las propias pasiones, de los deseos insatisfechos, de los egoísmos que fueron formando lacras y manchando la vestidura que cubre a la Esencia Divina. ¡Todo eso! ¡Mucho más! Vio en ese espejo brillante y límpido como no hay otro y descendiendo en raudo vuelo, pero con hondo dolor, traspasó al papel todo lo que su mente vio y su corazón sintió.A ti, lector amigo, se te ofrece con todo amor, lo que su amor creó a través de más de treinta años de escritura: “Orígenes de la Civilización Adámica”, “Moisés”, “Arpas Eternas - Cumbres y Llanuras”, “Llave de Oro - Siete Portales”. Pequeñas joyas espirituales: “El Huerto Escondido”, “Paráfrasis de la Imitación de Cristo”, “Lirios de la Tarde”, “Cinerarias”.En la lectura de sus manuscritos, iniciado aproximadamente el año mil novecientos treinta y dos y finalizados en el mes de Junio del año mil novecientos sesenta y cinco, te pido lo hagas con la sinceridad del que busca la Verdad, la Luz y el Amor.Si al término de ella tu corazón encontró lo que ansiaba eleva una plegaria al Altísimo de eterno agradecimiento, y a ella la siempreviva de tu amor reflejado a tus semejantes. Así daremos cumplimiento en nosotros mismos al Ideal de nuestro Divino Guía e Instructor: Ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.La transcriptora de los Archivos de la Luz dejó su morada terrestre el día 31 de julio del año 1965.